WebMail
CERELA - Chacabuco 145 - (T4000ILC) San Miguel de Tucumán, Tucumán - Argentina
Tel: 54 - 381 - 431 0465/1720 - 422 3565/3458/3573 Fax: Int. 124. e-mail: crl@cerela.org.ar
CERELA
Sobre el CERELA Productos y Servicios Contáctenos
Noticias
La ciencia en nuestro país y el mundo
Novedades
Enlaces
Links
Enlaces
Probióticos
¿Qué es un probiótico?
 

 

LOS PROBIOTICOS - Agentes beneficiosos para la salud

 

El sistema de defensa del organismo
Es el encargado de poner en marcha una serie de mecanismos para hacer frente a la invasión masiva de sustancias extrañas (antígenos). El tipo de respuesta inmune depende de la naturaleza del antígeno (virus, bacterias, parásitos, hongos, pólenes, determinadas proteínas provenientes del alimento), así como de su vía de entrada al organismo (piel, sangre, mucosa del tracto respiratorio, epitelio del tracto gastrointestinal).
La primera línea de defensa previene de la mayor parte de enfermedades infecciosas, y está constituida por barreras fisicoquímicas como son la piel y la capa mucosa (como, por ejemplo, a nivel nasal e intestinal). La inmunidad secretora de la mucosa —la IgA secretora—reacciona con los antígenos específicos previniendo el ataque de enteropatógenos a la superficie de la mucosa. Este efecto protector depende de la capacidad de unión al antígeno, denominado inmunoexclusión (Galdeano y cols. 2007)
 La respuesta del sistema inmune implica una compleja interrelación entre sus componentes. Se dan principalmente tres fases en esta respuesta:
-Identificación de la partícula extraña.
-Destrucción de la partícula extraña.
-Regulación de la respuesta inmune (mediante diversos mecanismos de retroalimentación o "feedback").

El sistema inmune intestinal permanece “no reactivo” a la microflora residente, lo cual es interpretado como una manifestación de tolerancia inmunológica. La superficie de la mucosa intestinal tiene mecanismos de defensa que discriminan adecuadamente entre la flora comensal, la simbiótica y los patógenos exógenos.
Este proceso es de vital importancia en la integridad del intestino. Una falla en este mecanismo puede tener como consecuencia procesos inflamatorios patológicos. Uno de los mecanismos de defensa para preservar la integridad del intestino es el efecto barrera; en este mecanismo, los microorganismos autóctonos contribuyen a la modulación de la defensa intestinal contra los patógenos.

El consumo de alimentos se relaciona con el sistema inmune en distintos aspectos. Toda ingesta de alimentos origina una respuesta inmune que generalmente desarrolla tolerancia a lo que podría ser una sustancia extraña al organismo. En efecto, las alergias provocadas por la ingesta alimenticia o reacciones de hipersensibilidad incluyen todas aquellas reacciones que implican la puesta en marcha de mecanismos inmunológicos; en este sentido, se distinguen de las intolerancias alimentarias donde no actúa el sistema inmune.

A principios de la década pasada se señaló la influencia de los Probióticos sobre la respuesta inmune. Es esencial que las bacterias ácido-lácticas (LAB, por su sigla en inglés) vivas sobrevivan después de atravesar el tracto gastrointestinal, para poder expresar así sus propiedades inmunomoduladoras. En este sentido, se observó que ciertas cepas de LAB actúan sobre las reacciones de hipersensibilidad retardada, la producción de anticuerpos y la activación funcional de macrófagos. Además, se ha podido demostrar que algunas son capaces de prevenir infecciones entéricas, así como de ejercer una acción antitumoral al inhibir agentes químicos carcinogénicos (de Moreno de LeBlanc A. y cols. 2007).

Más Información

1) Probióticos en el mercado
2) Tipos de probióticos
3) La flora intestinal y su relación con los probióticos
4) Competencia por los sitios de adhesión al intestino
5) El sistema de defensa del organismo
6) El L. casei en alimentos
7) Referencias