HISTORIA
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Nuestros comienzos |
Cerela es un instituto
de investigaciones de nivel superior dedicado al estudio de bacterias
lácticas (BAL) en dos grandes áreas: alimentos y salud humana
y animal. Fue creado a través de un convenio del que participaron
tres organismos: el CONICET, la Fundación Miguel
Lillo y la Fundación para la Educación, la Ciencia
y la Cultura (FECIC).
El Convenio Marco firmado entre el CONICET y la Universidad Nacional
de Tucumán (UNT) permitió optimizar el uso de infraestructura y compartir
recursos humanos, además de la formación de profesionales especializados
en el área de microbiología y biotecnología de bacterias lácticas.
Los impulsores de su creación fueron el Dr. Guillermo Oliver
y la Dra. Aída Pesce de Ruiz Holgado quienes consideraron la
necesidad de crear un instituto de alto nivel en bacterias lácticas,
dada la importancia de este grupo de microoganismos en la industria
de alimentos. El Centro se inauguró el 27 de agosto de 1976 con un plantel
de 10 personas en total:
Dos Investigadores de la Carrera de Investigación Científica (CIC)
de CONICET: Dres. Aída Pesce de Ruiz Holgado y Guillermo
Oliver
Un Becario
de CONICET: Bqca. Graciela Font de Valdez
Un Becario
contratado por la Fundación Lillo: Bqca. Graciela Savoy de
Giori
Tres Técnicos
de Apoyo: Dora Castro de Viera, Ricardo Francisco Haedo y
Enrique Leoncio Gutierrez.
Dos Auxiliares
de Mantenimiento: Oscar Alberto Sicilia y Narciso Eusebio
Ruiz.
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FRENTE
DEL EDIFICIO |
En 2006, el CERELA cuenta con 24
investigadores de la CIC-CONICET, 14 técnicos
de la Carrera del Personal de Apoyo y 22 becarios de
CONICET. Además, en forma permanente, nuestro Centro recibe pasantes
de distintas universidades argentinas y del exterior.
CERELA tiene una colección de cultivos de referencia
internacional que incluye 1200 cepas de diferentes
especies de BAL y una Biblioteca que cuenta con 60 títulos de
publicaciones periódicas actualizadas en formato impreso y
electrónico, además de: Bases de datos: Libris, Invest y Tesis.
La biblioteca integra la red ABBA (Asociación de Bibliotecas
Biomédicas Argentinas) y coopera con CAICyT (Consejo Nacional de Información
Científica y Técnica) y Bireme (Red de Información Tecnológica).
En sus 30 años de historia, CERELA ha formado un gran número de recursos
humanos ; se presentaron 61 Tesis Doctorales a la UNT
y se publicaron alrededor de 600 trabajos en revistas
internacionales con referato.
La transferencia de tecnología al sector productivo se ve reflejada
en tres productos que son comercializados por empresas nacionales: LecheBIO
(Leche fermentada bioterapéutica) (SanCor), Bioflora
(Probiótico reconstituyente de la microbiota intestinal (Sidus) y
ActioFerm (Fermentos autóctonos para yogur y quesos) (Tecnovinc
S.R.L.).
Hoy, con el esfuerzo de todos los integrantes del CERELA y el constante
apoyo de CONICET, la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica
(ANPCyT) y la UNT, así como de empresas que confían en nuestras investigaciones,
continuamos afianzando los objetivos institucionales.
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